El portavoz del Partido Popular de Totana ha señalado que su formación en Totana rechaza el proyecto de nuevo estatuto catalán por considerarlo que va en contra del espíritu de la Constitución de 1978, ya que del texto se desprende un claro intervencionismo, infringe el principio de solidaridad entre regiones, y además supone el primer paso para llegar a un Estado Federal, modelo de Estado distinto al que establece nuestra Carta Magna.
Esta reforma del Estatuto supone una clara maniobra encubierta de la Constitución, aseguró el edil totanero, quien afirmó que “crea un futuro incierto, que hará tambalear el período de estabilidad y desarrollo que ha experimentado España en estos 25 años”.
Martínez Andreo explicó que la sociedad española demanda la solución a problemas más importantes que la reforma del Estatut, problemas que el Gobierno de Zapatero ha dejado aparcados a un lado, y que cada vez preocupan más ,a los ciudadanos de Totana y Murcia, como es el caso del agua.
Además, añadió que su partido no va a aceptar en los ámbitos regional y nacional que “el proceso de modificación de los Estatutos suponga la creación de Comunidades Autónomas de primera y de segunda" .
Sobre el problema del agua indicó que éste es “un elemento integrador, un factor de vertebración del Estado, un bien común para compartir desde la solidaridad” y añadió que el Gobierno de Murcia se opondrá “con todas sus fuerzas”, como ya ha anunciado el presidente Valcárcel, a quien pretenda vulnerar el artículo 149 de la Constitución en lo referente a la legislación, ordenación y concesión de aprovechamientos hidráulicos.
El edil dijo que es una “”auténtica barbaridad” que nadie pueda hipotecar el futuro del agua como bien de Estado atribuyéndose competencias que no tiene e instó a los socialistas totaneros a que expliquen qué opinión tienen al respecto de esta medida legislativa recogida en el Estatut.
Criticó que Zapatero está más preocupado del Estatut que de los innumerables problemas y movilizaciones desde los distintos sectores sociales que han tenido lugar estos días, como la huelga de pescadores, de mineros en Asturias y León, que recibieron la promesa de Zapatero hace dos meses de llegar a un acuerdo con el Plan del Carbón , y del que ahora ya no se acuerda, de agricultores, de transportistas, mientras se celebraba el debate en el Congreso del Estatut.
Martínez Andreo asegura que no se trata de oponerse a este Estatut tan sólo por contradecir a Zapatero y el Gobierno socialista, sino porque hay fundamentos jurídicos suficientes que indican que este Estatut es claramente inconstitucional y va en contra del espíritu de consenso de nuestra norma básica de convivencia que es la Constitución de 1978.